viernes, 16 de octubre de 2009

Mi aventura de ser docente

Hola compañeros:

Fue muy enriquecedora la lectura de José M. Esteve, ahí claramente nos muestra varias experiencias que se nos hacen conocidas: como el miedo de los primeros días de ser maestros, el pánico que teníamos de que nos cuestionaran algo nuestros alumnos, la poca personalidad para imponer en nuestras clases, etc. Sin embargo todo esto es parte de la preparación que necesitamos en esta profesión, tan solo para ser mejores cada día aunque sea como lo dice el autor “por medio de ensayo y error”.
Me queda muy claro que para lograr una buena clase, esta tiene que estar apoyada principalmente en el interés de los alumnos, con preguntas y respuestas acertadas, y con una buena pizca de alegría al transmitirles nuestros conocimientos de una manera atractiva para ellos.
Tengo muchas esperanzas en esta especialidad, estoy segura que con la ayuda de nuestra tutora, de todos mis compañeros y mi propio desempeño, lograré mejores resultados en mis alumnos y en mi persona.
Que pasen muy buenas noches.

Mi confrontación con la docencia

Hola a todos:

Mi carrera como docente empezó pocos meses después de graduarme de la facultad, la oferta me llegó a la puerta de mi casa; un maestro que en ese entonces había quedado como coordinador interino del Cecyte Cadereyta, me fue a buscar a mi casa para ver si podía cubrirlo mientras el tomaba ese cargo, le comente que me dejara pensarlo mínimo un día, ya que yo tenía otros planes, finalmente decidí que sí lo haría. Me sentía inexperta en los primeros años ya que era casi mi primer trabajo formal y serio, y a la vez me fui dando cuenta de la magnitud de tal responsabilidad que había adquirido. Ahora pienso que tuve muchísima suerte de encontrar un trabajo sin haberlo buscado y que satisfactoriamente ha llenado todas mis expectativas, al grado de sentir que realmente me siento plena con lo que hago.
El ser docente del nivel medio superior, es algo que nos alimenta nuestro jovial entusiasmo día con día, por la relación directa con los adolescentes, su necesidad de ser escuchados, de aprender, hasta su problemática nos invita a quedarnos estacionados en esa etapa aplicando nuestras propias experiencias para sacarlos a flote de cualquier situación.
Mi satisfacción se da desde el momento que uno o varios jóvenes se acercan a contarte algún logro o problema, también en los resultados al finalizar una evaluación, en el momento de su graduación, cuando te los encuentras como ex alumnos y con una vida realizada, en fin, hay innumerables momentos que se convierten en algo que te empuja a seguir adelante.
La insatisfacción se presenta cuando tienes que luchar a contracorriente para lograr que se cumplan los objetivos que te solicitan mediante un programa, a veces, estos no se encuentran bien diseñados ni aterrizados a nuestro nivel medio superior y tienes que volver a programar para que se acople a tu alumnado, también a la falta de materiales y equipo tecnológico que es de suma importancia sin duda, a la poca ética profesional que te encuentras muy seguido en compañeros, etc.
Por todo lo anterior me he trazado la meta de seguir adelante preparándome y hacer mucho mejor mi propia historia profesional.

Los saberes de mis estudiantes

1) Lo que nuestros estudiantes saben hacer en Internet.
Lo que nuestros estudiantes dominan perfectamente son los espacios de comunicación, que va desde el Messenger hasta foto log, metro, facebook y otros que les sirven para publicar fotos y mensajes para sus amigos. Otra de sus habilidades es buscar música y vídeos de interés para ellos; los alumnos de preparatoria se inclinan por lo general en páginas que tienen más información visual que textual, en juegos, en información deportiva, etc.

2) ¿Qué podemos hacer para aprovechar esos saberes en el aula?
Si nos sirve de mucho los saberes que tienen nuestros alumnos sobre la red internet, la habilidad que adquieren tan solo por navegar en esos sitios es valiosa, ya que no les da miedo el usar las herramientas que nos da la red, el investigar nuevas cosas no los detiene al contario despierta mucho su interés y eso les ayuda para que tengan un auto aprendizaje. Lo importante es que los maestros en lugar de privar a los alumnos de su auto aprendizaje deberíamos aprovechar ese interés para llevarlos por el camino que nos marcan los programas de estudio, sólo necesitamos orientarlos para aprovechar el tiempo en sus clases e inculcarles que sean solidarios con sus compañeros para compartir sus conocimientos y habilidades.

3) ¿Quién van a enseñar a quién y qué le enseñará? y ¿dónde lo harán?
Todos podemos enseñar, maestros a los alumnos, alumnos a maestros, alumnos a alumnos, será un circulo de aprendizaje que se podrán apoyar conjuntamente en las tareas del internet y la nueva tecnología. Quien mejor que ellos (alumnos) para transmitir sus conocimientos a sus compañeros y a uno como maestro, es fácil determinar quien tienen cierta habilidad en algo para poder solicitar su conocimiento sin pena de ser señalado o criticado por otros. En la actualidad los jóvenes tienen el tiempo suficiente y la tecnología de punta al alcance de su mano y eso les permite ser expertos en alguna de las TIC, tenemos que aprovechar eso para generalizar habilidades y saberes.

La enseñanza se puede dar físicamente o virtualmente, puede ser en el aula, en el laboratorio de informática, en cualquier parte de la escuela, sólo debemos tener una computadora o algún aparato electrónico con el uso de la red internet.